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Malestar en el Congreso por el congelamiento de sueldos


El congelamiento de sueldos en el Ejecutivo y en el Congreso ha desatado un creciente malestar interno entre los legisladores, quienes anticipan una significativa reducción en sus ingresos mensuales. Esta medida, que implica el descuento del aumento salarial otorgado el mes pasado y luego revertido por la Casa Rosada, ha generado un clima de descontento entre los miembros del Parlamento.


Por ejemplo, un diputado del peronismo verá acreditado en su cuenta algo más de $900,000 la próxima semana, junto con otros casi $200,000 en concepto de "desarraigo". Esta cifra está muy por debajo de los $2.2 millones que percibieron en febrero, e incluso por debajo de los $1.7 millones de enero. La reversión del aumento salarial, aprobada por el presidente de la Cámara baja y la Vicepresidenta el 11 de marzo, ha dejado a muchos legisladores en una situación económica menos favorable.


El economista Matías Surt señala que desde 2018 el salario de los diputados ha disminuido en un 55%, superando la caída promedio de los trabajadores registrados. Esta situación ha provocado un ambiente de malestar generalizado en el Congreso, donde se espera que el tema vuelva a ser motivo de conversación la próxima semana cuando se depositen los sueldos.


En el Senado, también se espera un descuento en los haberes, aunque algunos senadores aún no han visto el impacto a través del sistema de liquidación de sueldos. Sin embargo, reconocen que es un debate antipático, especialmente debido a la baja estima que la sociedad tiene hacia el Poder Legislativo. A pesar de esto, muchos parlamentarios han optado por guardar silencio, conscientes de que oponerse al Presidente en este contexto no es sinónimo de popularidad entre el electorado oficialista.

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